Efs 1:6 “para alabanza de la gloria de su
gracia, con la cual nos hizo aceptos en
el Amado”
Fuimos
aceptados para salvación en Cristo, nosotros ya estábamos destinados para esta
gracia, 2Tim 1:9 “quien nos salvó y llamó con llamamiento
santo, no conforme a nuestras
obras, sino según el propósito suyo y la
gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos”
todo lo planeado debería de cumplirse en Cristo, nada estaba fuera de control,
la verdad del amor de Dios hacia nosotros es el reflejo del amor del Padre
hacia su Hijo, así como el Padre ama al Hijo, así; es como nos ama a nosotros, él
es la medida del amor de Dios, “por si se puede decir medida” Jn 17:26 “Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos” El Padre había amado a su Hijo
desde antes que el mundo fuese y nosotros estábamos en ese plan de amor de Dios
hacia su Hijo y que ahora es nuestro, Jn 17:24
“Padre, aquellos que me has
dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la
fundación del mundo” Jesús sabia del amor del Padre hacia él y por eso
lo declara.
EL
PADRE MANIFESTANDO DECLARANDO EL AMOR HACIA SU HIJO:
Mat 3:17
“Y hubo una voz de los cielos,
que decía: Este es mi Hijo amado,
en quien tengo complacencia” Jesús había causado a su Padre una
satisfacción agradable, él estaba contento con Jesús, pero; Jesús, en ese
momento; no había hecho ningún milagro, no había sanado a ninguna persona, no
había echado fuera un demonio, entonces en que dependía esa satisfacción.
Muchos de nosotros esperamos que nuestros
hijos terminen una carrera, tengan una empresa para así sentirnos satisfechos,
y ver a nuestros hijos agradándonos, pero, en el caso de Jesús no había sido
así, el Padre está satisfecho y contento con Jesús no necesitaba una obra que Jesús hiciera para el sentirse satisfecho.
Mat 17:5
Mientras él aún hablaba, una nube
de luz los cubrió; y he aquí una voz
desde la nube, que decía: Este es mi
Hijo amado, en quien tengo
complacencia; a él oíd. Jn 3:35 El Padre ama al Hijo, y todas las cosas ha entregado en su mano. Jn
10:17 Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar
EL HOMBRE JAMÁS PODRÍA O PUDO AMAR A DIOS SIN
CRISTO:
Era necesario que viniera Cristo para
mostrarnos el amor del Padre y llevarnos amar como el ama, ningún humano sin
Cristo podrá amar a la manera de Dios y de su Hijo, el amor de Dios se
manifiesta en Cristo y nos enseña amar, como él lo hace.
Jn 5:42
Más yo os conozco, que no tenéis
amor de Dios en vosotros. 1Jn 4:10 En
esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por
nuestros pecados.
ELEGIDOS EN CRISTO PARA SER AMADOS:
No podemos decir que su elección fue en tiempo
terrenal, su amor fue desde antes de la fundación del mundo, desde antes de
nuestro nacimiento él sabía que íbamos a pecar, conocía que nos alejaríamos de él,
pero; eso no impidió el crearnos, por
eso, ya había un plan alterno desde antes de la fundación del mundo se había gestado,
pecamos y deberíamos de volver a casa por eso Dios envió a su hijo por rescate
de nosotros
El nos AMO a nosotros y nos eligió 1Pe
1:2 elegidos según la presciencia de
Dios Padre en santificación del Espíritu,
para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz
os sean multiplicadas. Efs1:5 en amor
habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de
Jesucristo, según el puro afecto de su
voluntad
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